En los pasados GLOBOS DE ORO la premiada Glenn Close se expresó
con estas palabras al recibir el premio: “Estoy pensando en mi madre que toda
su vida dependió de mi padre y a los ochenta años me dijo que pensaba que no
había logrado nada…Lo que se espera de nosotras es que tengamos hijos, tengamos
nuestro marido, si tenemos suerte, pero necesitamos sentirnos realizadas,
tenemos que cumplir nuestros sueños, tenemos que decir: yo puedo hacer eso y
deberían permitirme hacerlo”.
Lo que se esperaba de nosotras a muchas ya no nos gusta, no porque
no queramos tener hijos o marido, que eso es una opción muy respetable, sino también
porque optemos por no tener ni lo uno ni lo otro y seguir siendo valoradas como
mujeres completas.
Lo que nosotras esperamos es poder ir por la calle sin asustarnos
cuando vemos a un hombre; lo que esperamos es dejar de ser violadas (en los
siete primeros días del año se han producido varias violaciones en toda España
y una de ellas en “manada”); lo que nosotras esperamos es que se nos respete;
lo que nosotras queremos conseguir es erradicar la violencia de género, que no
doméstica ¿O acaso las violaciones múltiples perpetradas en Pamplona, Canarias
y Alicante se produjeron en casa de alguien?.
No estamos dispuestas a ser moneda de cambio para nada ni para
nadie; no renunciamos a los derechos adquiridos ni a adquirir los que aún no
llegaron. Lo que nosotras esperamos es que no se nos insulte, menosprecie o se
nos llame feminazis por reivindicar lo que es justo y beneficioso para toda la
sociedad.
Escrito para LA VOZ DE CASTELLDEFELS