jueves, 5 de septiembre de 2019

UN PERFECTO CABALLERO ABUSÓN

Si estás sentada junto a un compañero de trabajo, y este se levanta, te pone las manos sobre los hombros y a continuación te coge una teta y te la estruja sin tu consentimiento ¿cómo lo llamarías?
Si te besan en los labios sin que tu quieras, si te meten la mano por debajo de la falda contra tu voluntad, si te llaman con insinuaciones sexuales a altas horas de la noche, si te proponen tener sexo y no aceptas y por ello dejan de contratarte ¿cómo lo llamarías?
Si quien hace todas estas acciones dice que eran siempre consentidas y bienvenidas y añade que “las reglas y estándares por los cuales somos, y debemos ser, medidos hoy son muy diferentes de lo que eran en el pasado” Sí, unos estándares tan normales que pasaban por despedir a la que no se plegaba a sus deseos. ¿qué pensarías? Y ¿cómo lo llamarías?
Pues esta es la presunta historia de un cantante de ópera llamado Plácido Domingo, al que han acusado, hasta ahora, veinte mujeres y del que han hablado ellas y hombres con la agencia de noticias Associated Press.
En España Ainhoa Arteta, la presidenta de la SGAE y Paloma San Basilio lo defienden. Ellas sabrán  el porqué ¿haciendo patria de manera mal entendida?  Incluso una de ellas lo define como un perfecto caballero. Sí, desde luego, un presunto perfecto caballero abusón.
Escrito para  LA VOZ DE CASTELLDEFELS

LA PERVERSIDAD DE LAS MUJERES

El Museo Thyssen de Málaga tiene una exposición en estos momentos que se titula: Perversidad. Mujeres fatales en el arte moderno. La comisaria y directora del museo, Lourdes Moreno, en el vídeo de promoción de la misma, nos explica que en el mundo de las bellas artes, la idea de mujer fatal surge en el siglo XIX para focalizarla desde el punto de vista negativo.  Moreno constata que el hecho surge a raíz de las primeras reivindicaciones sociales de las mujeres. Ese modelo de mujer fatal en el arte evoluciona a principios del siglo XX cuando aparecen las mujeres poderosas, independientes y libres que irrumpen en ese mundo como creadoras.
Un amigo me decía que el titulo de la exposición estaba buscado para atraer al publico, dado el morbo que el nombre provoca: perversa, equivalente a mujer fatal. No obstante (sigo con Moreno), la comisaria quiere hacer hincapié en que uno de los significados de perverso es aquel que se propone cambiar el orden establecido y no tanto el de la maldad.
La cuestión es que a la mujer se la ha visto, y una parte de la sociedad la sigue viendo, como el origen de la perdición del hombre. Y, aunque hayamos avanzado, es cierto que muchas mujeres se ven relegadas por los hombres cuando su capacidad de iniciativa parece “atentar” contra el status laboral o social de algunos de ellos. 
Los que así actúan no han entendido todavía que cuanto mas libre sea la mujer y más iniciativa se le deje tomar, mejor es la sociedad para todos. Tanto la visión masculina, como la femenina, aportan maneras de hacer y crecer necesarias. La perversidad de las mujeres, en su acepción positiva, es un tanto en el haber de los comunes. La perversidad, en su acepción negativa, es inherente al genero humano, sin distinción entre hombres y mujeres.
Escrito para Club Còrtum como Átomo

lunes, 5 de agosto de 2019

LOS DISCURSOS DE ODIO PRECEDEN A LOS CRIMENES DE ODIO

La que sigue es una reflexión de Adama Dieng, Subsecretario general de la ONU y responsable principal de la Prevención del Genocidio.
“El genocidio de los tutsis en Rwanda empezó con discursos de odio. El holocausto no empezó con las cámaras de gas, comenzó mucho antes con discursos de odio. Los hechos contra la población rohingya en Myanmar también empezaron con discursos de odio. 
Hoy somos testigos en todo el mundo del aumento del extremismo, ya sea en Europa, Asia y en todas partes. Cuando vemos un incremento de la cantidad de grupos neonazis, de grupos totalitarios. Cuando vemos la forma en que los migrantes y refugiados son despreciados, debemos hacer todo lo posible por abordar los discursos de odio. Recordemos que las palabras matan, as palabras matan tanto como las bales. Por eso debemos hacer todo lo posible por invertir en educación, en los jóvenes, para que la próxima generación pueda entender la importancia de convivir en paz. Debemos hacer todo lo posible para que atentados como los que hemos visto en Sri Lanka, en Nueva Zelanda, lo que hemos visto en Pittsburgh, todo eso pueda acabar. Y para detenerlo necesitamos invertir y movilizar a los jóvenes. Debemos usar la palabra para que se convierta en una herramienta de la paz, una herramienta para el amor, para la unidad social, para la armonía, en ves de que sea usada para cometer genocidio y crímenes de lesa humanidad.”
Trump, Presidente de los EE.UU. condena los tiroteos de El Paso y Dayton, en donde murieron más de treinta personas. Creemos que hay sinceridad en sus palabras. Lo que también creemos es que sus discursos supremacistas alientan el odio de los cerebros desestabilizados como los de estas dos personas que él solo califica de perturbados y no de racistas.
Cuando Trump arremete con comentarios racistas contra cuatro congresistas demócratas, conocidas como el escuadrón, y les dice que si no les gusta el país en el que viven (porque protestan por sus actos contra los emigrantes) se vayan de Estados Unidos, por el mero hecho de que su origen está en otros países del mundo, está también alentando ese odio perverso que acaba en muchas ocasiones en violencia y muerte.
Los discursos de odio preceden a los crímenes de odio.
Escrito para La voz de Castelldefels